La construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) requerirá mil 800 hectáreas de superficie de amortiguamiento y necesitará 6 mil metros cúbicos de agua diariamente para su operación.
El proyecto implicará la compra de predios “directamente con cada uno de los ejidatarios” y la expropiación de terrenos será en caso de que los propietarios se muestren renuentes vender, informaron autoridades de la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Las hectáreas servirán para superficies de amortiguamiento para cuestiones de seguridad e impacto acústico y el valor de los terrenos se discutirá de manera particular con cada uno de los propietarios.
El proyecto tendrá 3 mil 616 hectáreas. Los terrenos que se prevé comprar son zonas agrícolas de temporal en Zumpango, Tecámac y Nextlalpan, principalmente
Alrededor de 300 pobladores de Tecámac, Zumpango, Nextlalpan y Temascaltepec acudieron a la reunión celebrada en la escuela primaria Pedro Rodríguez Vargas de Zumpango, quienes reclamaron una consulta pública y cuestionaron las afectaciones del proyecto en materia de agua y vial.. Los representantes de la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena), informaron que la consulta popular ya fue realizada en San Miguel Xaltocan en marzo pasado y que no hay posibilidades de efectuar otra. En la reunión, estuvieron representantes del Instituto de Ingeniería de la UNAM (II-UNAM), quienes determinaron que la obra del AIFA en la base aérea de Santa Lucía es viable en materia ambiental y aseguraron que los daños de la obra a la flora y fauna son mitigables. “Ya se ubicaron las áreas y se identificaron 26 especies de 5 mil 200 árboles.
Habrá una reubicación del 40 por ciento de árboles mayores a 4 metros de altura y el resto se utilizará para composta y habrá una reposición de ellos”, destacaron. Después de un análisis de campo “no se detectaron especies endémicas”. Tampoco, habrá daños a las cinco áreas naturales protegidas aledañas al proyecto, sobre todo cerca del municipio de Temascalapa; ni mucho menos al Lago de Zumpango.
La reunión de información se denominó “Construcción de un aeropuerto mixto civil/militar con capacidad internacional en la Base Aérea Militar 1 Santa Lucía, su interconexión con el AICM y reubicación de instalaciones”. Jesús Mejía Gómez y Alfonso Víctor Paz, representantes del II-UNAM, afirmaron que la obra está respaldada con la normatividad en materia ambiental, tanto nacional como internacional. Los especialistas aseguraron que en la zona hay un desarrollo urbano sin planificación y que 45 por ciento del suelo es de característica urbana, además de que en Tecámac y Zumpango existen problemas de saturación de sus vialidades.
Para mitigar la dispersión de partículas durante la construcción de la obra, los camiones irán a baja velocidad y darán mantenimiento a la maquinaria. Los especialistas en ingeniería afirmaron que los requerimientos del aeropuerto en materia de agua sería de 6 mil metros cúbicos de al día “es el .45 de lo que hoy en día se extrae; es 84 veces menor que el consumo humano. El aeropuerto no compromete el consumo humano de agua de la región”. La obra contempla la instalación de plantas de tratamiento de agua y uso de aguas pluviales.
En representación del Agrupamiento de Ingenieros Santa Lucía de la Sedena, Luis Enrique Calderón Fernández y Jesús Cándido Abreu Callejas, aseguraron que el nuevo aeropuerto tendrá 750 mil operaciones aéreas y para 2021 dará servicio a 80 millones de pasajeros al año 2021, aunque la capacidad inicial será de 55 millones de pasajeros. La base militar de Santa Lucía fue creada en 1942 y cuenta con 2 mil 331 hectáreas de superficie.
El Ejército realiza actividades de vigilancia del espacio aéreo y auxilio a la población en casos de emergencia, además de prácticas de paracaidismo. La nueva obra, contará con tres pistas para aterrizaje y despeje de aeronaves, podrán operar aeronaves de grandes dimensiones, incluso de 800 pasajeros A los reunidos se les informo que la obra contempla la construcción de tres pistas en el polígono de la actual base militar, una terminal de pasajeros, así como la construcción de estacionamientos para 4 mil usuarios y que en la parte sur del polígono será la reubicación de las instalaciones militares.
Los representantes de la Sedena informaron que en la interconexión entre el Aeropuerto Internacional Benito Juárez y el Aeropuerto Felipe Ángeles será de 46 kilómetros que se hará en 45 minutos de tiempo.
El recorrido pasará por terrenos de Venustiano Carranza, Nezahualcóyotl, Texcoco, Atenco, Ecatepec, Xaltengo, Tultitlán, Nextlalpan, Tultepec y Tecamac. El 15 de abril, la Sedena entregó el Estudio de Impacto Ambiental a la Semarnat y la dependencia emitirá su resolución entre el 25 de junio y el 11 de julio. “Si es favorable, iniciarán los trabajos correspondientes”, aseguraron.
La Organización de los 12 Pueblos Originarios de Tecámac desconoció la consulta convocada “porque pretende suplantar la consulta indígena que hemos venido exigiendo reiteradamente”.
FUENTE: MILENIO